Columna: "Con papá en la popular"

"...a los niños, la policía no los revisaba antes de entrar al estadio. Era el blanco perfecto".

Escribe: Diego Samalvides

La semana pasada, mientras permanecía sentado en clase, leía unos poemas de Antonio Cisneros desde la última silla del salón. De un poema a otro pasé a leer una entrevista escrita en la que el poeta se confesaba hincha del club Sporting Cristal. Una serie de recuerdos me embargaron. Sentí que debía volver al estadio como cuando peleábamos la baja en el 2007. Papá y yo íbamos religiosamente todos los fines de semana junto a sus amigos, un puñado de exbarristas que dejaban la garganta en la tribuna de oriente. Antes el fútbol era una fiesta. Los bombos, las arengas deliberadas, las banderolas, los rostros pintados. El fútbol había perdido su gracia a raíz de las múltiples restricciones que se dispusieron en cuanto al acceso de objetos a los estadios. Recordé con gracia que papá tenía un amigo barrista al que le apodaban “Rompebanca” un hombre que, por su contextura colosal, era conocido, precisamente, por romper bancas. Era un buen tipo, pese a que las personas le tenían una mezcla de respeto y miedo por su imponente figura robusta. Una vez me regaló una máscara celeste de los “Power Rangers” por darles una mano con los juegos artificiales. Era pequeño, a los niños, la policía no los revisaba antes de entrar al estadio. Era el blanco perfecto. Me ataron todos los explosivos al cuerpo con el fin de que pudieran pasar desapercibidos. Tenía unos veinte kilos más. Parecía el hijo de “Rompebanca”.

Foto: Luis Miguel Flores

Mientras la profesora explicaba con gestos y ademanes el tema de la clase, yo solo pensaba en las memorias de aquella campaña con el Sporting. Le escribí a papá, le dije que quería ir al estadio y aceptó a mi pedido. Me dijo: “compra dos entradas para occidente”. A lo que respondí: “No, papá. Esta vez quiero ir a la barra, nunca hemos ido juntos”. Y era verdad, nunca habíamos ido juntos al extremo. Todos los partidos que frecuentábamos en antaño eran en calidad de espectadores parcos que observaban minuciosamente el partido como un rito estrictamente silencioso, con nervios y preocupación hasta el estallido de gol, el pico de éxtasis que nos conducía a abandonar los asientos y abrazarnos sudorosos. A lo que papá respondió: “Bueno, tendré que bajar mi level”. Enseguida compré dos entradas para la popular. Los días restantes al partido me la pasaba leyendo estadísticas, analizando videos de partidos pasados, goles, fallas en ofensiva, rivales. Los boletos se agotaron días después. La fiesta estaba garantizada. Hasta que llegó el día: domingo por la mañana. Me levanté, me puse la camiseta y enrumbamos al Gallardo. Siempre me sentí cómodo en los alrededores al Gallardo. Entramos al estadio temprano para ver a la reserva. Cuando llegamos ya iban ganando. El partido de la reserva terminó 4 a 1. Luego, dieron la vuelta: se lo merecían, habían campeonado, nuevamente. Durante el partido sufrimos, pero Lobatón nos devolvió la esperanza. Un viejo conocido. El gol estaba en la banca. Fue victoria bajopontina. Papá buscaba en la tribuna a sus viejos amigos entre otros jóvenes barristas de la nueva camada rímense. Esta vez no estaba “Rompebanca” ni “Peloduro” para meter miedo al rival. Estábamos los dos solos y las graderías repletas de hinchas desconocidos. Vi en sus ojos la añoranza de aquellos días como barrista, viviendo al límite, huyendo de todos lados, cantando en esa fiesta de papel picado, alegría e incertidumbre. Era mi primera vez en la tribuna popular del Alberto Gallardo y estaba con papá. Luego salió el sol, era necesario: había ganado el Cristal.

¡Fuerza Cristal!

EL RIVAL: Independiente Santa Fe

Llega como campeón colombiano y participa por onceava vez en la Copa Libertadores, siendo está su quinta presencia de manera consecutiva. Como entrenador tiene a un viejo conocido: Gustavo Costas, campeón también en Ecuador y Perú.

El esquema táctico que suele usar es un 3-5-2. Dentro de ese once como referente tiene a Yeison Gordillo un 6 que se encarga de meter presión en la mitad del campo, quitando balones por doquier y evitando la ofensiva del rival, además cuenta con buen remate de larga distancia. Podríamos decir que una de sus fortalezas del equipo bogotano es su defensa. 

Otra de las figuras dentro de este once es Omar Pérez, el capitán, un mediocampista con alma de 10 que es el encargado de generar fútbol pero que precisamente es una de sus falencias, no es un equipo agresivo en la zona de ataque es más le cuesta crear ocasiones de gol y últimamente ha tenido varios problemas en la definición. Suelen aprovechar los espacios teniendo buenas transiciones defensa-ataque que le valió estar invicto en más de 20 partidos.

En la actualidad se encuentra sexto en el torneo colombiano, hace 3 fechas que no gana y recientemente sumó otro partido sin ganar frente a Wanderers al caer por 2-0 en Bolivia.

Este jueves Sporting Cristal enfrentará al conjunto Bogotano desde las 7:45 de la noche (hora peruana) en el Nemesio Camacho más conocido como "El campín".

¡Fuerza Cristal!

POR BUEN CAMINO

Sporting Cristal no pudo alcanzar el triunfo y empató 1-1 con Santos FC. Sin embargo, en varios pasajes del partido mostró buen fútbol y le jugó de tú a tú a un grande de Sudamérica. 

Fuente: Club Sporting Cristal

La noche de ayer en el coloso del Estadio Nacional, Sporting Cristal empezó su camino en la Copa Libertadores. El resultado fue 1-1 con gol de Jorge Cazulo. Si bien un empate de local es poco auspicioso, se vieron cosas positivas para el cuadro bajopontino

Al frente se encontraba un rival de jerarquía como el Santos brasileño, un equipo con tantas copas con tanta historia. Uno de los rivales más difíciles que le tocaba a los celestes después de años en un inicio de Copa. Pese a eso, los dirigidos por Chemo del Solar, no se dejaron amilanar y salieron hacer lo suyo, con orden táctico, respetando lo que el guión manda y tratando sobre todo de sostenerlo los noventa minutos. Se pudo conseguir hasta una desatención en marca. 

El partido inició con un cuadro celeste muy atento en todas sus líneas, haciendo rodar la pelotita en la zona que más le gusta y haciendo daño cuando tenía que hacerlo. El gol llegaría desde la pelota parada, un error de Santos en la trampa del off side que fue bien aprovechado por Cazulo que de cabeza pondría el 1-0.

Viana a lo suyo, tapando las más difíciles y dando la seguridad que años atrás habíamos perdido en el arco, Garcés ganándose el puesto de titular con salidas claras y no tanto metiendo el pelotazo y Cazulo comandando la defensa y cruzando cada ofensiva brasileña. Uno de los más bajos fue Revoredo que casi siempre le llegaron por su lado y poco o nada pudo hacer para detener al colombiano Copete. La volante también jugó su partido aparte, desde Aquino, que ayer jugó a un nivel de selección, quitando balones hasta el último minuto y metiendo cuerpo como se debe meter en este tipo de competencias. Lobatón clarito con el balón, el bendito pase largo que limpiaba jugadas. Joel tratando de jugar por el medio con movimientos rápidos pero que fue bien parado por la defensa brasileña. Lo de Sandoval irregular y Costa bastante participativo donde tuvo chispazos de buen nivel y arriba Ifrán que le costó recibir el balón por lo que tuvo que retrocedes casi siempre. 

En el segundo tiempo Santos tomo el control de partido como era de esperar, haciendo peligro sobre todo por la zona de Revoredo, que le costaba volver cada vez que subía. Antes que llegue el gol brasileño, Lobatón saldría por Ballón, fue ahí que la visita tomo el balón y se puso a jugar por el medio, una desatención en marca le costó claro a los cerveceros y Thiago Maia pondría el 1-1 final. 

Los minutos fueron pasando y faltando 10 para que termine el partido, los celestes iban a tener dos ocasiones claras, la primera desde la pelota parada, tremendo remate de Ortiz que la sacaría bien el arquero Vladimir. Y la otra opción de gol fue un cabezazo de Blackburn, que nuevamente en una tapada felina el arquero de Santos la pudo sacar y así evitar el tan ansiado gol.

El partido terminaría en empate. Partido difícil para los celestes en su debut por Copa pero que pese a todo dejaron una buen impresión en su juego, sobre todo respetando el estilo y sosteniéndolo durante los 90 minutos. Habrá que corregir errores lo más rápido posible ya que se viene el partido ante Santa Fe en Colombia. 

El agradecimiento con el hincha que ayer ayer asistió al Nacional, se dejó ver un buen marco para esta noche de fútbol y copa. Iba a ser penoso que se suspenda por la mala cabeza de ciertos hinchas que hicieron reventar una bombarda en el primer timepo. Algún día aprenderán.

¡Fuerza Cristal!

Así los vimos: Sporting Cristal vs Cantolao

Fuente: Club Sporting Cristal

Mauricio Viana (11): El menos culpable dentro del accionar en el equipo, su estilo de jugar va de la mano a la funcionalidad de sus compañeros. Ayer quedó expuesto por falencias múltiples dentro del campo.

Édison Chávez (10): Todo bien hasta el gol, después hizo del desorden una forma de ser. Por su banda llegaron los desbordes más peligrosos del rival. Muy expuesto.

Luis Abram (08): Una mañana-tarde terrible, para quien normalmente tenía rendimientos medianamente altos. Técnicamente mal y sumando a su carácter apagado de siempre. Muy cabizbajo y consecuente para equivocarse en salida.

Renzo Garcés (13): El rescatable futbolista dentro de lo malo, correcto en sus coberturas y acertado para salir jugando desde atrás como le gusta a Chemo. Podría alcanzarle para la noche de Copa Libertadores. 

Jair Céspedes (13): En ataque como siempre un elemento rescatable pero fue muy mal coberturado en defensa por el volante Christian Ortíz. Y así es complicado para un lateral con características tan ofensivas. Mucho por trabajar si no está por ahí Ray Sandoval u otro volante que se complemente bien. 

Josepmir Ballón (10): Sumamente desordenado para ser el único volante en ancla, recoger en sus espaldas el peso del equipo en factor defensivo. Errando pases y quedando expuesto en coberturas. Muy por debajo del nivel visto. 

Horacio Calcaterra (11): En su primer partido como titular y con carné Peruano, no sumó para ser referencia en la volante del Sporting Cristal. Marcó el gol sí, pero no fue la ‘aduana’ como siempre terminaba siendo para la circulación de juego en los titulares.

Írven Ávila (10): Falto de fútbol y sumamente expuesto ante la exigencia del fútbol en primera división. Le está costando muchísimo la vuelta al rendimiento que lo hizo muy querido. Ayer como capitán, de un trabajo bastante pobre.

Alexi Rojas (10): El año pasado de actuaciones intermitentes, confirmó lo que se veía viendo. Poco desborde y por ahí la intensión mínima de hacer una labor ofensiva. Ante un Cantolao bastante discreto tuvo un trabajo muchísimo más que irregular.

Christian Ortiz (10): En su aventura primera como titular tenía los focos encima pues es un fichaje del entrenador, está en teoría predestinado para jugar la Copa Libertadores por la banda izquierda. Pero ayer no intentó ni asociar ni individualizar. Se perdió en un partido que necesitaba de su talento para jugar.

Rolando Blackburn (10): Debut para él con cosas muy interesantes en movimiento sin balón, con el balón le costó un poco porque el equipo en sí no tuvo una participación acostumbrada a lo último. Pivoteando para sus extremos pero siendo muchas veces bien cubierto. Queda esperar todavía.

A VOLTEAR LA PÁGINA LO ANTES POSIBLE

Sporting Cristal cayó de local por 4-1 a puertas de su debut en Copa Libertadores. El único tanto celeste lo hizo el peruano Horacio Calcaterra.

Foto: Juan Alcántara

Es que el fútbol es así, se tiene que reír de todo sin excepción. Está presente en resultados, jugadas y por ahí toques de suerte.
Inclemencia del sol en un horario que tiempo atrás no era tan fuerte como el de ahora. Las 11 de la mañana un horario clásico para todo hincha celeste pero que hoy, hay que tener más cuidado con el espectador que soporta las altas temperaturas y la fuerte radiación.

Vamos con el fútbol, comenzamos como siempre. Jugando con el balón al ras del césped, bien cuidado e intentando siempre la rotación del mismo como también de cada uno de los futbolistas en base a movimientos constantes.
Premio a ello el gol de un compatriota novel, Horacio Calcaterra. El buen Calca volvía al Gallardo con la estampa de ser más peruano que la papa y no ocupar ése cupo de extranjería restringido desde la Federación Peruana de fútbol.

¿Pero qué pasó después?
Seguidilla de encuentros, cansancio acumulado o ¿será el cambio brusco de nombres en el conjunto titular?
Difícil entender porque después del gol que normalmente es bálsamo para entablar mejor juego, se cayó repentinamente de nivel y actitud.
Pasar por una transición deprimente, de ser el líder del acumulado por puntaje y goles menos encajados a un pobre equipo sin sentido de reacción, realmente distinto a lo que se vio en las primeras fechas.
Hay responsabilidad en todos, alguien la tendrá que asumir porque así lo dicen los tablones de historia.
Hay muchos señalados, bien o mal. Por actuación por debajo, muy por debajo de lo que acostumbran a brindar (en la zona de calificación entramos detalladamente).

Se viene la copa, a un par de días nomas, esa copa donde somos aquel único representante. Digo único por envergadura de club grande, aquella copa donde hace buen rato se queda en la garganta la palabra "Clasificados".
Se viene Santos éste jueves con pocos nombres relevantes, al igual que Cantalao y miren qué pasó. Está claro que las historias son distintas y cada 90 minutos suelen cambiar, ese es el bendito fùtbol, porque si todo estuviese escrito, lo aburrido que sería. Pese a la derrota hay confianza y mientras la haya hay que luchar.

¡Fuerza Cristal!

SÓLO FALTÓ EL GOL

Sporting Cristal empató 0-0 frente a Unión Comercio en el inicio del Torneo de Verano. El cuadro celeste empezó bien pero con el correr de los minutos su juego se fue diluyendo.

Foto: Juan Alcántara

Sporting Cristal no pasó del empate por la primera fecha del Torneo de Verano y solo pudo quedarse con un punto en el Alberto Gallardo.

El torneo recién empieza, los jugadores salen de una dura pretemporada, así que por lo pronto es normal que el juego no tenga consistencia los 90 minutos. Eso le pasó a los celestes. El conjunto cervecero tuvo 15 minutos claros de buen juego, con llegadas claras al área de Comercio, sin embargo el último toque no contaba con la precisión que se necesita.

Diego Ifrán, el 9 que Chemo mandó a la cancha, por momentos se le vio muy solo, sin poder recibir balón alguno, por lo que tuvo que salir del área para tener más oportunidades, pese a eso poco o nada pudo hacer. Su juego se mostró casi desapercibido y por momentos se le encontraba desorientado, casi sin saber qué hacer.

En el segundo tiempo fue un poco más de lo mismo, Sporting Cristal empezó con ganas pero el fuerte sol que azotaba el Alberto Gallardo fue pausando el juego del último campeón peruano. En la vereda de al frente, el ‘diamante’ Julio César Uribe, se llevaba un punto muy importante a Moyobamba, defensivo o no, rateando o no, fue un negocio para él aguantar el marcador.

La próxima fecha Sporting Cristal viajará a Sullana para enfrentar a Alianza Atlético. El partido está pactado para el domingo a las 4:00 de la tarde (GolPeru).

ES TIEMPO DE REVANCHA, POR LA 18.

Dentro de un Domingo parco y algo intrigante, el equipo principal entendió que tenía la obligación de afrontar un rival jodido. Complicado desde el juego y por lo que ésto suponía. Cuatro finales en diez años demuestran que hay una responsabilidad con todos, fútbol peruano e hinchas que armaron su banderazo.

Qué bien Penny, magnífico y puntual cuando se le requirió.

¿Hace cuánto no se podía catalogar así al portero rímense? El tiempo pasa y jamás termina siendo consecuente con los presentes, se le exigió muchas veces por errores grasos. Pero cuando más quemaba el balón, asumió baluartes y por ahí terminó destacando. CLASIFICANDO ante un complicado Deportivo Municipal (que jamás incomodó su portería en 90 minutos).

En un partido donde la solución tenía que caer de inmediato, un viejo. Viejo conocido pudo encontrarse con un balón que dejó prácticamente perplejo a medio ‘Estadio Nacional. Carlos Lobatón con toda la jerarquía en ése pie derecho, empalmó con la calidad requerida un disparo fuerte y direccionado. Que en teoría debía acomodas absolutamente todo en favor al cuadro local, pero todo lo contrario. Se entrampó pero con todo ello, se intentó jugar como quería el DT.

¿Cómo quería el DT?

Equipo amplio con una base que siempre intente jugar rápido, toques cortos y transiciones largas en búsqueda del punta. En ésta oportunidad fue Diego Ifrán, Uruguayo que llegó para ser solución y confianza dentro del equipo ofensivamente. Ayer luchó, metió y desgastó a una dupla que se pasó de rústica. Zela e Hinostroza se cansaron de golpear y nuevamente no tuvieron impedimento.

Un trabajo sacrificado fue lo que vivió tanto Ramúa como extremo por izquierda y Calcaterra haciendo la banda por derecha, ida con vuelta. Con balón y sin él. Para poder coberturar la salida importante de Céspedes, Jair que tuvo a mal traer a Corzo. Revoredo por derecha estropeando las galopadas de ‘Damichón’. Medio campo con Lobatón regular, intermitente. Alternando buenas y malas. Ballón y Aquino peleando mucho, jugando lo justo. Correctitos ambos.

Dupla central que con el tiempo pareciera haber encontrado un equipo. Sale Cazulo y espera Abram. Cuando el rival es muy alto arriba siempre irá Luis, cuando el rival se le escapa al zurdo. Aparecerá el capitán Cazulo para apagar incendios. Dentro de lo luchado se vio un equipo más integrado, más unificado para poder así pelear algo que se huele a revancha. Melgar éste domingo 11. Tocará viajar y disfrutar de todo lo que ello traerá.

Los penales fueron moneda al aire, con Cazulo lanzando al cuerpo del ‘Loco’ Delgado y Silva tirándo arriba con la ayuda del travesaño. Calcaterra, Ramúa y Rojas enmendaron errores. Nuevamente es justo mencionar a Diego Alonso Penny dentro de lo más llamativo. Atajando, desviando con su presencia y dejando una postal que seguramente quedará para la historia. Intimidando a un tipo como Zela, con un extraño movimiento.